Ch. R. Darwin, descubridor imberbe en la foto
Una cita que puede dar mucho que hablar, o que pensar. Ranúnculo rápidamente preguntaría ¿Hasta donde llega la ciencia? ¿Hasta donde llega su campo de estudio? y ¿hasta donde llega ella misma (qué es ciencia y qué no)?, ¿donde están ambos límites para la ciencia?
Fuente:
Microsiervos
7 comentarios:
Ayudándome una vez más de Russell, esta cita que leí hace nada está bastante relacionada:
"Es un mal del mundo el que los tontos siempre estén tan seguros y los inteligentes duden tanto".
Interesantes preguntas retóricas las que propones. Pensaremos en ellas :D
El ignorante tiene un patio en su casa y no tiene ni idea de lo que hay al otro lado de las paredes. De manera que cuando alguien lo visita puede decir que las macetas de su patio las hizo Dios (en ese espacio no hay fábricas de macetas), que las plantas de adorno nacieron por generación espontánea (nadie sembró nada), y se queda tan pancho. Ni tan siquiera es consciente de estar haciendo el ridículo.
El visitante puede dudar, porque sabe que hay fábricas de macetas y conoce el efecto del viento transportando esporas.
No se sabe qué es mejor, si intentar derribar las paredes del patio o sacar al ignorante de allí. Pero ambas acciones requieren voluntad por su parte o permiso.
Así que lo mejor es "pasar de él". Uno puede explicarle las cosas, pero no está obligado a insistir. Si insistes pensará que te estás riendo de él, y en ese caso ya le concedes la razón. A gente así no le duelen los palos, de manera que...
Una cita genial, sí señor.
Un mal del mundo inevitable, creo.
Jejejje no había visto tu mensaje Siespierre, muy cierto también.
Muy buena frase de barbapapá.
Hablando de ignorantes y ciencia he recordado una historia muy esclarecedora de Russel.
El bueno de Bertrand describía en una conferencia cómo la Tierra giraba alrededor del Sol y cómo éste, a su vez, giraba alrededor del centro de una vasta colección de estrellas conocida como nuestra galaxia.
Al final de la charla, una simpática (por decir algo) señora ya de edad se levantó y le dijo desde el fondo de la sala: «Lo que nos ha contado usted no son más que tonterías. El mundo es en realidad una plataforma plana sustentada por el caparazón de una tortuga gigante». El científico sonrió ampliamente antes de replicarle, « ¿y en qué se apoya la tortuga?». «Usted es muy inteligente, joven, muy inteligente -dijo la señora-. ¡Pero hay infinitas tortugas una debajo de otra!».
Hasta donde llega la ignorancia para afirmar conclusiones de tal calibre, la señora y muchímas personas también hacen el ridículo creyendo tales barbaridades. La ciencia no aspira a establecer verdades inmutables, simplemente acercarse a la verdad por aproximaciones sucesivas, sin pretender que se ha conseguido ninguna etapa final. Siempre estará condicionada a que se la perfeccione, nunca tenderá a crear axiomas inviolables. La ciencia simplemente llegará a donde alcance nuestra imaginación.
Saludos de Rick
"El ignorante afirma, el sabio duda y reflexiona.
Aristóteles"
Mirad lo que me acaba de soltar google :D
Rick
Jejeje genial, como el Mundo disco de terry pratchett :D
Un saludo!!!
Bueno, los sabios y eruditos también afirman rotundamente que ciertos problemas no tienen solución: en gran parte de los libros y artículos que he leído, numerosos especialistas y sabios afirman que algunos de los problemas de la mente nunca tendrán solución, como el "binding problem" (que, como sabéis, probablemente ya haya sido resuelto en Vulcano hace algún tiempo, al menos, de manera hipotética, si sabéis a qué me refiero), de modo que estas afirmaciones no sólo se deben a ignorancia, sino a ego: si no se me ocurre a mí la solución, que soy un superfenómeno, un Einstein redivivo, es imposible que se le ocurra a alguien.
Espoc
Publicar un comentario