Un grupo de ballenas jorobadas en las aguas de Alaska, grabadas desde un dron, hace apenas unos meses.
Atentos al minuto 0:50 en el que el grupo de ballenas se aúna para llevarse la mayor cantidad posible de arenques. Esta es una técnica transmitida culturalmente y de una complejidad maravillosa, la describí en mi charla del Naukas Quantum de 2013 que podéis ver pinchando aquí (minuto 5:50).
Wikipedia lo describe así:
"La técnica más destacada se conoce como «red de burbujas», en la cual un grupo de individuos nadan en círculos concéntricos soltando burbujas por los espiráculos bajo los cardúmenes de peces. El anillo de burbujas rodea el cardumen de peces, cerrándose progresivamente, confinándolos en un cilindro cada vez más pequeño. Entonces, de forma súbita se lanzan sobre ellos tomando un gran bocado y así deglutir miles de peces de un trago. Las placas ranuradas en la boca del animal le permite drenar fácilmente toda el agua tomada en la maniobra. El anillo formado por las burbujas puede tener hasta treinta metros de diámetro y requiere la cooperación de una docena de animales. Usando cámaras (crittercam) adosadas a la espalda de las jorobadas que algunos individuos sueltan las burbujas, otras se sumergen más profundo para conducir los peces hacia la superficie y otras amontonan las presas dentro de la «red» mediante vocalizaciones"
Gracias al enorme trabajo que hace Fred Sharpe y su equipo (con crittercams) conocemos la maniobra. Hay varios documentales que relatan muy bien la técnica (aquí un ejemplo).
Fijaos como las ballenas del vídeo se encuentran expulsando burbujas por sus espiráculos en el momento de salir a la superficie (1, en la imagen inferior), además se encuentran formando un circulo (2). Probablemente la ballena central (3, flecha) sea la líder de la acción, y la que emite el sonido que espanta los arenques hacia la superficie.
Una belleza, ¡y una suerte poder apreciarla! El hecho de que cada vez veamos más vídeos de cetáceos grabados desde el aire me hace pensar que los drones puedan tener una gran utilidad en este campo. Los cetáceos son muy sensibles a la presencia de humanos con barcas (y sus motores), esto quizás nos mantenga algo más alejados.